SUPERVIVENCIA

Tengo un vicio, lo reconozco. Llevo años callándolo ante amigos y familiares (y compañeros de trabajo). Si el anterior post fue un traumático reconocimiento, éste alcanza cotas superlativas: me trago todos los documentales sobre animales que echan por la tele. No puedo evitarlo. Sobre todos los que van sobre especies remotas en lugares casi inexistentes: África, Sudamérica, Australia, Centroamérica, Europa, otra vez África. No puedo evitarlo. Me quedo pegado como una lapa viendo al animalito de turno haciendo el animal, atacando a otros, siendo atacado, construyéndose la casa (cuando entramos en la etapa de celo siempre cambio de canal, porque en ese aspecto me sigo consderando un menor), etc.

Estos reportajes siempre me han resultado de lo más ilustrativos. No sólo muestran cómo es el mundo en realidad, sino que además no muestran lo ingnorantes que somos. Siempre hay un animal que hace algo mejor que nosotros, que coopera más, que es más hábil, que sobrevive en condiciones más duras, etc.

Pero lo que de verdad me llama la atención es lo culturizados que estamos, la cantidad de aspectos que nuestra cultura nos ha metido en la cabeza, y que no están realmente en la naturaleza. Lo sorprendente, en este sentido, que puede llegar a ser, por ejemplo, ver cómo se las ingenia una araña para acabar con una avispa o un moscón. O cómo ningún animal (grande, pequeño o microscópico), ninguno, tiene la más mínima misericordia ni con los de su especie, ni mucho menos con los de la contraria ("qué bestia" exclamo a veces). Esto me lleva a preguntarme cómo hemos llegado nosotros a ser como somos partiendo de una base tan... dura, hostil.

Aquí dejo esto para su consideración.