miércoles, 15 de septiembre de 2010

SSSSHHHH...

...It´s oh so quiet.




He visto que el último post que publiqué fue una mamarrachez allá a mediados del mes de junio. A mis compañeros de blog la languidez tardó mas en llegarles, el último, Rocco, aguantó estoicamente el sopor veraniego hasta finales de julio y desde entonces La Boca Chancla se sumió en una plácida siesta veraniega donde ningún esfuerzo, ni siquiera intelectual, tuvo cabida...

El mes de septiembre, parece, está siendo como una de esas mañanas de domingo en las que uno abre el ojo, comprueba que ya es de día, se acuerda de que es domingo, y lo vuelve a cerrar dando media vuelta en la cama.

Mantener un blog es para mi un entretenimiento cultural al que dedico la escasa franja de tiempo que me queda para mi solaz, y ahora -soy una criatura compulsiva- la tengo colapsada por la apasionante inmersión literaria en las batallitas navales de otros tiempos. Ya contaré, si eso. Pero no busco excusas. La pereza es la principal razón de mi silencio. Eso, y una especie de pudor que me da escribir viendo lo que tengo a mi alrededor, empezando por los otros dos bocachanclos y siguiendo por los de la columna de la derecha, los que siempre están entre los primeros puestos. Es ahí donde suelen estar los que escriben casi a diario: la Pluma Viperina, Molinos y sus molinadas, el Membrive, el consultor en paro y los demás. Ellos tienen de qué escribir o hacen por tener. Y si no lo tienen, hablan de cualquier parida. Pero lo hacen tan bien que a uno sólo le queda mirarse y decir -¡pero a dónde vas, piltrafilla!

Bueno, sirva la mención para agradecerles desde estas lineas a sus autores el descanso que me proporcionan la lectura ligera, divertida o la reflexión profunda, según el caso, de sus blogs. Y para romper mi propio hielo.

¡Ya me he levantado, feliz domingo de septiembre!

4 comentarios:

El Subdirector del Banco Arús dijo...

¿Qué me va a contar, caballero? El señor Neri algún día me va a matar. Y sí tengo sobre que escribir pero parece mentira que no encuentre tiempo con las pocas obligaciones que tengo. Podría dejar el ejercicio pero tengo adicción. Mis obligaciones sociales también soy importantes pues he de aprovechar los últimos estertores de mi juventud antes de que mis amigos se casen, tengan hijos y me quede más solo que la una.

A ver si hoy o mañana hago un esfuerzo.

marian dijo...

Chirli, ya era hora. Yo no tengo síndrome de las mañanas de domingo pero estoy padeciendo el "periodo de adaptación" de los mellis y no tengo ganas de ná.

Sr.Subdirector, ¿estertores de juventud? Vamos hombre, no será para tanto.

Chirly dijo...

Subdire. Veo que está usted en las mismas.. aunque al menos su último pos no fue ninguna mamarrachez, y no ha pasado ni un mes desde que lo publicó, Que hablá de la curtyra y la grasia de Bibi eh lo ma grandermundo. Y qué decir de ésas dos palabras ELSA y PATAKY...

Marian. Lo del periodo de adaptación tiene un post (que yo estoy ahora mismo al borde de la úlcera con el desquiciante periodo de marras también). Así que lo escribes tu o lo escribo yo.

Anónimo dijo...

El periodo de readaptación a la vida corriente es lo peor... yo he tenido un par de crisis... a puntito he estado de tirar libros y apuntes por la ventana... ainsss, llevo estudiando ya 3 años y las opos están más muertas que Tutankamon...

Si sabeís de algún trabajo, avisadme.

Pero no me he cruzado de brazos. Estoy luchando por resolver mi vida... asi que he colgado mi perfil en www.beautifulpeople.com(una red social sólo para gente guapa) ;)