Una reflexión del todo a cien, de las indocumentadas, insuficientemente reflexionadas y nada contrastadas. Quien me conoce sabe que así son mis reflexiones y que me paso el día en ellas:
La vida es una enorme cadena donde un acontecimiento no hubiera tenido lugar sin otro que le precede. Y da igual lo trascendental que éste sea que sin la cadena de, a menudo, absurdos e insignificantes eslabones, no hubiera ocurrido.
Por ejemplo: yo conocí a mi mujer en una fiesta a la que no quería ir. Pero fuí porque el amigo que me invitaba era mu pesao. No hubiera ido jamás a esa fiesta si no hubiera conocido a mi amigo. Conocí a mi amigo en un campamento, concretamente en la enfermería por que me di un piñazo jugando al pilla, pilla. Si no hubiera ido al campamento, no habría conocido a ese amigo. Si en el campamento no hubiera jugado al pilla pilla tampoco le hubiera conocido.
Luego si aquél día de verano, por detenerme en cualquier punto de la cadena (podría seguir retrocediendo averiguando porqué fui a aquél campamento y entonces saltaríamos de generación y pasaríamos a mi madre), digo que si aquel día no me hubiera dado por jugar al pilla pilla, mi hijo nunca habría nacido, porque no me habría casado con mi mujer, porque nunca la habría conocido en la fiesta de un amigo al que nunca habría conocido. ¿O quizá si?
6 comentarios:
Sabe usté una cosa, Sr. Chirly?
Creo que es afortunado por tener la mujer que tiene. Lista, bella, amable, simpática, con sentido del humor para aguantar sus torbellinescas aficiones, para soportar amigos pesados que insisten en llevárselo de parranda dejándola con los churumbeles un viernes in the night, para ver pelis que no le molan en el cañón,...en fin.
Busque a ese amigo y dele las gracias, varios millones de veces.
PD. Tenemos pendiente el ciclo hermanos Coen. Yo pongo la hendriks y, aunque suene mal, también pongo el pepino.
Sr. Chirly: es usted un provocador.
En realidad, como sabe usted bien, todo está predeterminado y nuestra libertad de acción -o margen de maniobra- es bastante reducida. Bendito Calvino! Y si no fuera porque lo que unos llaman suerte y otros providencia hubiera pasado por su lado otra hubiera sido la cantinela.
Lo de la libertad personal no es más que un cuento. Pero qué libertad, si no somos más que materia. Y si nos vamos al ámbito religioso, sólo se puede hablar de predestinación, ya que el futuro sólo puede estar en la mente del Creador. Qué alguien me lo niegue!
Tiene que leer más a Benito (Baruch) Spinoza y su Ética. O a Hegel y su Fenomenología del Espíritu. Hombre, por el amor de Dios! Si es que nos pasamos el día haciendo afirmaciones vacuas, cuando todo ya está inventado. Tanto volver permanentemente a Kierkegaard (cuando su obra más reseñable es su propio diario!) trastoca y trastorna la salud en las conciencias.
Lea, lea el libro que le comento, y ya verá.
(P.d. Quien me conozca que me entienda) :-D
Me gusta tu reflexión Chirly, por interesante y por divertida. A mí me hace gracia que siempre pensamos en "qué hubiera pasado si..." cuando ha ocurrido algo malo, tratamos de volver el tiempo atrás y nos gustaría rectificar, pero pocas veces creo que lo hacemos pensando en cosas positivas.
Hay que ver como pueden llegar a cambiar mucho las cosas con pequeñeces. Por eso yo creo que cada cosa que hagamos es importante. Quizás una simple sonrisa que le echaras a esa chica hizo que se fijara en tí y que ahora sea tu mujer... En fin que yo con estos temas me pongo a desvariar :-)
Ya le dije -Sr. Booz- que soy un indocumentado y no como usted. No leeré el libro que comenta (a parte de porque me da pereza) porque sé que no soy permeable a la cultura y la filosofía que no sean las que salen de mi torbellinesca mente -que diría el otro-. Soy como un guijarro en medio del río: ya puedo estar sumergido una vida entera, que me saca usted de ahí y resulta que ¡no me ha empapado nada!
Además yo no hablo de predestinación ni de libertad o ausencia de ella. A lo que yo iba era a que nos pasamos la vida añadiendo eslabones a la cadena uno detrás de otro, y nos agobiamos cuando creemos que estamos a punto de llegar a uno muy gordo y muy importante. Y no, resulta que la chica de tu vida; la madre de tus hijos, la única persona que te acompañará hasta el final de tus días, es la que conocerás si sales a echarte ese pitillo a la puerta de la oficina, y te animas a entablar conversación con ella...
Nunca, jamás en su vida, había ido al fútbol, y nunca jamás volvió a ir. Le convenció su prima, y allí estaban las dos, un día muy ventoso, apartándose el pelo de la cara..¡Qué viento hace! Le dijo un desconocido y apuesto joven oficial que pasaba por allí..y empezaron a hablar..y hasta hoy.
Así lo contaba ella, por primera vez, a sus 80 y tantos, después de 7 hijos, a una de sus 14 nietos.
Da vértigo sólo de pensarlo.. Mejor dejarse llevar que si no uno se bloquea...
Elena Nito
Los juristas llamamos a eso causalismo. En penal había doctrinas positivistas en el XIX que sostenían que "la causa de la causa es la causa del hecho causado", o algo así. O sea que la madre del fabricante de la bala disparada era la causante del crimen, y así hasta el infinito.
Yo no creo mucho en las casualidades ni en la suerte. De hecho creo que responsabilizar a "la suerte" de todo es propio de pobres diablos y de fracasados que no tienen ninguna decisión o capacidad propia de la que sentirse orgullosos y por eso todos sus males los atribuyen al azar.
La casualidad influye en los resultados en un determinado porcentaje variable, pero creo que los éxitos y los fracasos de la vida tienen más que ver con una cadena de buenas decisiones, con la capacidad de renunciar a lo pequeño y aguardar a lo grande, y con no contentarse en cada encrucijada de la vida con el sendero más cómodo o más obvio.
Su mujer, Chirly, bien podría haber sido otra de no haber acudido al fiestorro de su amigo palizas, pero la pregunta clave es si usted se habría casado con otra chica completamente opuesta a su señora que no le hubiera hecho feliz ni dado un hijo maravilloso. Yo pienso que si usted era de una determinada manera de ser y tenía claras ciertas cosas, habría llegado al mismo punto en que se encuentra por otros caminos o con otras personas distintas, eso sí(exceptuando pequeños matices dados por el azar).
Lo chungo es ir al buen tuntún por la vida, sin importarnos la coherencia ni los valores, decidiendo hoy lo contrario que ayer o guiándonos por las apetencias. Es entonces cuando la puta suerte se mete en nuestra vida hasta dominarla por completo.
Publicar un comentario