martes, 27 de octubre de 2009

ALARGAMIENTO DE...







Los hay que intentan alargar su pene con métodos rudimentarios. Unos con ejercicios musculares que, según dicen, ayudan a desarrollarlo. Y otros recurren a esos aparatos realmente curiosos que se promocionan de madrugada en algunas televisiones.

Pues bien, nuestro protagonista de hoy no debía de tener tiempo para probar todos los métodos que he expuesto en el primer párrafo por lo que decidió hacer un "Mix" de todos ellos: algo casero, barato, que fortalezca los músculos y alargue el pene. Si una simple pesa o mancuerna sirve para cumplir todos esos objetivos en otros músculos como el bíceps o el tríceps, ¿serviría para el pene?

Para responder a esa sencilla pregunta decidió poner en marcha su plan. Este inteligente americano decidió coger un disco de 10 kilos. Había dos posibilidades: una, atar el disco a una cuerda y ésta al pene -tal y como uno puede hacer en el gimnasio cuando, para hacer dominadas, te atas un disco a la cintura, lo dejas caer y así levantas más peso- y la segunda era la de meter el pene por el agujero del disco. Pues bien, si las dos eran pésimas ideas, el chico se decidió por la peor, la del agujero.

El Inteligente metió el pene por ahí y ya fuera por acumulación de sangre, por sucios pensamientos o por todo a la vez, aquello empezó a crecer y quedó aprisionado por el disco.


El brioso deportista estuvo con el pene atrapado en el disco tres días incapaz de liberarse de él porque la sangre había quedado acumulada y había hinchado el todo. Tuvo que acudir a un hospital donde los médicos le liberaron gracias a una amoladora que cortó el disco.

La conclusión de esta historia: a quien Dios se la de, San Pedro se la bendiga.

Y digo yo que este muchacho, ya que se ponía, debería haber intentado alargarse también el cerebro, porque mucho, y en buen estado no tenía.

4 comentarios:

María dijo...

Animalico... no puedo decir más (que me da la risa)

El Subdirector del Banco Arús dijo...

Pufff.... Hay gente pa'tó. ¿Es verdad o una leyenda urbana?

Al Neri dijo...

Las personas que usan alargadores, bombas de aire y esas guarradas (que me ha contado un amigo que existen)deberían acudir al psiquiatra urgentemente.

Rocco Lampone dijo...

Querido Subdirector:
parece ser que fue verdad. Es algo asombroso. La capacidad de los inconscientes de hacer el imbécil es increíble.

Sí, Sr. Neri, existen unos cuantos artilugios. No responden nada más que a las ganas de las empresas de sacar perras de tonterías humanas.
Y, si no van al psiquiatra, igual una temporadita en prisión surte efecto

Srta. Rocío, yo lo primero que hice fue retorcerme de risa (luego de dolor, imaginando la situación...)